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sábado, 18 de septiembre de 2010

El acuerdo UE-Marruecos hundirá nuestra producción agraria.

AES considera que el acuerdo comercial Marruecos-UE ataca la agricultura mediterránea española y hunde al sector dedicado al tomate. El gobierno ha entregado a nuestros agricultores. AES pide a los eurodiputados españoles que defiendan nuestra agricultura en el Parlamento Europeo.


El documento final de acuerdo comercial entre Marruecos y la UE que ahora deberá ratificar el Parlamento Europeo supondrá, en caso de salir adelante, un gravísimo perjuicio para la agricultura mediterránea española, que se verá sometida a los efectos de una competencia desleal. El acuerdo se hace sobre la violación de los propios términos del mandato de negociación del Consejo de Europa, pues era fundamental prestar atención en la negociación a aquellos productos cuyos calendarios de exportación coincidan con la producción en los países de la Unión Europea.

AES quiere subrayar que el acuerdo es una cesión ante las exigencias de Marruecos que dañará especialmente al sector del tomate español hundiendo a las explotaciones de Murcia, Valencia, Canarias y Andalucía.

AES quiere denunciar que, para favorecer a los consumidores de determinados países, se han elevado las cuotas de importación a arancel bajo que tenía Marruecos, lo que supondrá, dada la facilidad para burlar los cupos establecidos, la arribada masiva de productos agrarios contra los que será imposible competir dadas las condiciones laborales de Marruecos.

AES quiere subrayar que el gobierno de España, como gusta decir al ejecutivo, no ha defendido nuestra agricultura ya que, siendo por decisión propia el valedor de la dictadura marroquí ante la UE, parecía estar más interesado en que este acuerdo preferencial saliera adelante que en mantener los puestos de trabajo de miles de españoles.

AES considera que la teórica compensación que supone la progresiva liberalización, salvo en determinados productos, de la entrada de alimentos transformados europeos en Marruecos no es suficiente y que a la larga este país desarrollará esa industria de transformación con precios, por lógica laboral, más bajos.

AES, que se asombra del silencio de los partidos en este punto, espera que los eurodiputados españoles voten no al acuerdo en el Parlamento Europeo.

Madrid 17 de septiembre de 2010

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