Aunque sus dirigentes acudieron masivamente a la manifestación del pasado 17 de octubre a dar testimono del “compromiso con la vida del partido”, tres días después, su portavoz, Soraya Sáenz de Santamaría, aseguró que su partido “modificará” la nueva ley del aborto cuando llegue al poder, en caso de que el proyecto del Gobierno se apruebe en sus actuales términos. Y esto lo dijo tras preguntársele en 3 ocasiones si su partido derogaría la nueva ley de llegar alguna vez a gobernar. Es decir, NO la derogarán, aunque la modificarán.
Y después se apresuró a dejar claro que el aborto queda garantizado por su partido al recurrir a un sentimentalismo repugnante para afirmar que el PP hará “todo lo que esté en su mano para que los padres sigan teniendo derecho a estar con sus hijas y a tomar juntos una decisión familiar tan grave y tan importante como un aborto”.
Ni tres días le ha durado al PP el camuflaje provida que le han brindado en bandeja las “plataformas cívicas”.
Cada día resulta mas evidente que desde que Mariano Rajoy volvió de la reunión de Mejico, el Partido Popular ha agudizado su deriva moral y pronto le pasara al PSOE pero por la izquierda, que al cabo y a la fin es tan abortista quien creo la ley, que quien no la combate; al Partido Popular le doy mi mayor desprecio ya que me viene en la cabeza una cita de Ortega y Gasset:
"El crimen mayor esta ahora, no en los que matan, si no en los que no maan y dejan matar"
Además debemos recordar que el PP es un partido claramente abortista y fue quien legalizo la fecundación IN-VITRO, la investigación con embriones y los que importaron la PDD a España.
El PP es culpable del aborto por activo y por pasivo.
El PP lo que tiene una cara muy dura y cada día demuestra que por alcanzar el poder, venderían a su propia madre, además no tienen reparos en captar el voto y la confianza de la gente de bien, para hacerlos cómplices de sus vilezas.
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